Hoy he tenido fiebre, 39 dicen que marca el termómetro, me quedé mucho más tranquilo porque mi fiebre era mesurable, lejos del infinito. Si tuviera el "conocimiento" de mi amiga Ana, que relaciona los números con colores, sin fumar ni nada, diría que tuve "verde, azul de fiebre" pero no lo encuentro demasiado serio como para contárselo al médico. Así que con la medida del reino es mejor decir !! Casi cuarenta !!. Es así, 38 es una ridiculez, ni poco ni mucho, pero llegas al cuarenta y se disparan las alarmas. Cuestión de números.
He leido una encuesta de una web católica, naturalmente, realizada a los curas y más del cincuenta por ciento no entienden el celibato y otros tantos no entienden la financión del estado. Hay más apartados curiosos pero estos dos me llamaron la atención por esos porcentajes. Nunca entendí mucho a los del clero, pero sexo y dinero debe ser un problema general. Aquí los curritos prefieren sexo a dinero. Sin embargo en Roma y los cargos que terminan en "ispo" no tienen la misma opinión sobre el euro, lo demandan. Los deseos carnales, en vista de las estadísticas "se les supone".
Quince es un número de soldados, no me gustan lo soldados. Pero me gustan mucho menos cuando estan a miles de kilómetros del pais que los "entrena para la paz". Tampoco me gusta que los capturen otros soldados porque un día se harán daño de verdad. Con todas esas premisas y utilizando una mujer de propaganda (una cadena es tan fuerte con el más debil de sus eslabones), unos y otros estan jugando a buenos y malos. No sé, ni me interesa, si estaban aquí o allá cuando los pescaron, pero con los medios que existen seguro que se puede averiguar hasta el último milímetro. Uno pide perdón, el otro lo acepta y ya está, todos a casa y los soldados a convertirse en héroes. Sinceramente, el verde,azul de fiebre según la escala de Ana me ha matado más neuronas de las necesarias. He confundido la realidad con los deseos.
La realidad me puede, escuchen : Un hombre es condenado a pagar una pensión a su mujer después de una separación. El hombre cumple puntualmente. Pasan los años y la señora decide dejar de ser Juana para convertirse en Joaquin. ¿ Debe seguir pagando la pensión el pobre hombre ?. Toma ya. Si yo tengo más que una duda razonable, me temo que ni mi ídolo, el juez calvo, lo resuelva.
Año I Nº 78
Un buen día para practicar con los seises y los nueves.
Gandhi & Muftí
